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esde hace ya varios años la mentalidad de la gente ha ido cambiando en lo que respecta al valor nutricional de los alimentos que tomamos, haciendo que lo que antes no tenía tanta visibilidad, como por ejemplo los macronutrientes, ahora pase a tener un papel principal en el menú diario. La evolución de la sociedad ha hecho que ahora lo que comemos tenga más importancia y miremos con lupa que sean alimentos con un valor nutricional positivo para cada uno de nosotros. Esto, como no podía ser de otro modo, también ha afectado a los restaurantes, que para crecer junto con la sociedad deben ofrecer al público un menú (o varios) capaz de satisfacer ya no solo al paladar de los comensales, sino además todas sus exigencias nutricionales.
El impacto de la sociedad actual
Hoy en día el ritmo de vida de muchas personas es demasiado frenético. La sociedad actual ha cambiado mucho si la comparamos a la del siglo pasado, y muchas cosas que se han ido aplicando con el paso del tiempo son beneficiosas para todos, pero otras no lo son tanto. El progreso de la sociedad a veces genera un impacto en los individuos que no se aprecia a primera vista.
El crecimiento de las ciudades en todo el mundo, así como los cambios en las estructuras familiares y sociales, sin olvidar algo muy importante como son los horarios laborales y estudiantiles, han provocado que una gran cantidad de personas se vean en la obligación de tener que comer fuera de casa. ¿Quién no ha ido a clase o a trabajar con algo de prisa y de camino ha pasado por el supermercado para comprar algo dulce?, ¿quién no ha tenido que comer en algún sitio cercano al trabajo o la universidad por saber que no le dará tiempo de hacerlo donde siempre?. A veces la vida moderna impacta de forma negativa en ciertos aspectos, y es algo que tenemos que corregir.
El valor nutricional de los alimentos para formar un plato equilibrado
Lo ideal para que el valor nutricional de nuestro plato sea el adecuado sería que al menos la mitad esté compuesto de verduras y frutas, siempre intentando que exista una variedad de ellas. Además de las verduras y frutas, hay que añadir granos integrales, ya que estos tienen un menor efecto en el azúcar de nuestra sangre que otros alimentos de grano como por ejemplo el arroz blanco o el pan refinado de toda la vida. Los granos integrales deben ser como máximo, una cuarta parte del plato. Como no podía ser de otro modo, las proteínas deben estar en cada plato de nuestro menú. El pescado, el pavo, el pollo o las nueces y algunas legumbres son generalmente las opciones recomendadas por ser las más sanas, ya que otros tipos de alimentos con un valor nutricional alto en proteínas, como pueden ser las carnes rojas o las carnes procesadas, no son tan saludables para nuestro organismo.
Los errores del menú de restaurante
En muchos (que no todos) de los restaurantes en los que se ofrece el menú del día, hay una carencia de productos con buen valor nutricional. Que sea complicado encontrar primeros platos basados en legumbres, que haya primeros platos que podrían llegar a considerarse segundos en una dieta normal, o que por ejemplo no se disponga de una ensalada sencilla para comer, son algunos de las deficiencias de muchos menús actuales. Se suele ver pescado, pero no muy elaborado, y rara vez un molusco, como pulpos o calamares. Se debería ofrecer la opción de comer pan integral en lugar del blanco, que es mucho menos saludable, y como colofón, los postres. En la gran mayoría de restaurantes el postre tiende a ser algo dulce, con un exceso de azúcar y grasas saturadas, en lugar de uno hecho de frutas, o una fruta propiamente dicha.
Concienciación
En definitiva y como conclusión, los menús de restaurante aún tienen que desarrollarse en el ámbito del valor nutricional, ofreciendo platos variados y sanos. La sociedad está cada vez más concienciada con cuidar su salud y esto, con el tiempo se reflejará en el futuro en los menús.
